El lenguaje se
configura como aquella forma que tienen los seres humanos para comunicarse. Se
trata de un conjunto de signos, tanto orales como escritos, que a través de su
significado y su relación permiten la expresión y la comunicación humana.
La complejidad del
lenguaje es una de las grandes diferencias que separan al hombre de los
animales, ya que si bien estos últimos también se comunican entre sí, lo hacen
a través medios instintivos relacionados a diferentes condicionamientos que
poca relación tienen con algún tipo de inteligencia como la humana.
A pesar del
desconocimiento del origen del lenguaje, lo único que es posible afirmar es que
resulta absolutamente imposible definirlo en forma acotada, ya que se trata de
una facultad humana que evoluciona constantemente ante la aparición de nuevas
necesidades de expresión. De este modo, no existe ninguna lengua que pueda
decirse completa, ya que no existe alguna que logre expresar la totalidad de
sensaciones, sentimientos e ideas que siente el ser humano.
Con la actividad
que voy a aportar pretendo crear en los alumnos y alumnas un interés, ganas de
participar y aprender de todos, entre otros. El tema elegido es la amistad, con
ello pretendo que los alumnos descubran:
-El valor de la
amistad.
-Las actitudes que
la favorecen.
-Las dificultades
que a veces comporta.
-Su valor en las
relaciones sociales.
-Que la amistad
exige generosidad.
-Que el egoísmo, el
engaño y la intolerancia destruyen la verdadera amistad.
El curso que he
elegido es cuarto de primaria, por lo que según Piaget su etapa correspondiente
es la de Operaciones concretas, 7-11 años. Esta etapa marca un paso más
avanzado en el desarrollo de la captación del objeto. Las nuevas adquisiciones
alcanzadas proporcionan una mayor consistencia al conocimiento del objeto, lo
cual permite la realizar operaciones mentales de seriación y clasificación,
entre otras.
Una operación es
psicológicamente una acción cualquiera cuyo origen es siempre motriz,
perceptivo o intuitivo. Las operaciones en este período son las llamadas
concretas en el sentido de que afectan directamente a los objetos y aún no a
hipótesis enunciadas verbalmente. Esto implica que tienen que estar ligadas al
presente inmediato y no al mundo de lo posible.
La característica más
transcendente de este estadio es la aparición de operaciones, concebidas como
las acciones interiorizadas que se integran a una estructura de conjunto. El
pensamiento se vuelve verdaderamente lógico.
Un docente que
actúe coherentemente con esta teoría, procurará que sus clases propicien la
vivencia concreta de los contenidos planteados en los objetos de los programas.
Es vez de plantear situaciones hipotéticas, procurará ejemplificar su clase
utilizando como instrumentos de mediación los recursos que el alumno pueda
percibir concretamente y no ejemplos abstractos carentes de significación para
aquel.
La actividad se
desarrollará en el aula, apartando las mesas y sillas para poder sentarnos en
forma de círculo todos en el suelo, con el fin de poder vernos.
Empezaré la
actividad diciendo en alto la palabra “Amistad”, en este momento, únicamente
les pediré que piensen qué es para ellos de manera individual. Más adelante
diremos en voz alta qué es para nosotros, incluida yo.
La actividad
durará alrededor de una hora y media.
Para que la
actividad salga correctamente, les comentaré una serie de normas, las cuales
hablaremos si están o no de acuerdo con ellas, con ello lo que busco es que
piensen en modificar alguna o incluso llegar a aportar alguna.
Estas primeras
normas son:
-Respetar el turno
de palabra.
-Respetar la opinión
de todos los compañeros/as.
-Levantar la mano
antes de hablar.
-Se habla cuando la
profesora dé el turno de palabra.
-Ser capaces de
crear un ambiente agradable y favorable para el acto comunicativo.
DESARROLLO DE LA ACTIVIDAD
Se iniciará la
actividad con la pregunta “¿sabéis que es la amistad?” Mostraremos fotos,
recortes de prensa, de revistas,… con niños y adultos en actitud de pelea y
otras en situaciones de amistad.
Se realizarán
preguntas sobre lo que ven en ellas y qué piensan sobre lo que hacen. A partir
de esto, preguntaremos a los niños sobre la amistad,, quiénes son sus amigos y
por qué lo son, procurando que describan las cualidades que definan la amistad,
intentando llegar al final con algo así:
Para la descripción
de estas cualidades les propondremos las siguientes preguntas:
-¿Cómo deben actuar
los buenos amigos?
-¿Cómo se sabe que
dos niños son buenos amigos?
-¿Qué hay que hacer
para ser un buen amigo?
Finalmente haremos
una puesta en común, y cada niño/a, de manera individual, deberá empezar una
frase de amistad con las siguientes palabras: “Los mejores amigos…”.
Estas frases serán
colgadas en clase de manera anónima.
Tengo que resaltar
que en esta clase tengo dos alumnas cuyos comportamientos son realmente
opuestos. Por un lado esta Lucía, una niña muy tímida, a la cual le cuesta
participar y hablar en público; y por otro lado está Daniela, una niña que es
muy inquieta y necesita ser en muchas ocasiones el centro de atención.
Desde el principio
de la actividad, comenzamos hablando sobre imponer las normas, intentaré que
Lucía aporte ideas sin que se sienta agobiada y presionada; e intentaré que
Daniela se calme haciéndole ver muchas veces que somos muchos en clase y que
todos queremos participar, y no solo ella.
A la hora de
organizarnos en el suelo, dejaré que se coloquen como quieran, dejando a Lucía
que esté cercana a sus amigas para que se sienta más cómoda.
Al final de la
clase y con las normas escritas en la pizarra, escogeré a un alumno al azar
para que evalúe a su compañero de la derecha y así hasta haber sido todos
evaluados, solo para que tengan en cuenta lo que su compañero ha percibido de
esa persona, ya que considero que es más efectivo cuando un amigo te dice en
qué debes mejorar.